Abuelos

Puede que haya trabajos mejor pagados, de hecho los he tenido, pero ninguno de ellos me va a hecho tan feliz como este, ninguno me hizo sentir el cosquilleo por el cuerpo que siento cuando un trabajo terminado, y eso no es pagable con dinero…

Entrar en el Estudio, y comenzar una sesión de fotos, con un niño o una niña que se muestran muy tímidos y terminar la sesión tirados literalmente por los suelos de la risa, y recibir palabras de agradecimiento de los padres por lo bien que nos lo hemos pasado, es una de las mejores cosas que le pueden pasar a uno mientras está trabajando. O que un día, haciendo unas fotos a mamá, venga un “mico” de dos años, arrastrando el ventilador por todo el estudio, y te diga… “¡yo foto con esto!” y todo ello, porque ha visto una foto en el móvil de mamá y ella le ha dicho que tengo un ventilador para hacer fotos y claro, ella quiere!
Y si hablamos de bodas.., ufff se me ponen los vellos de gallina pensando en los sentimientos, en los momentos más importantes que hay que recoger!

Hoy más que nunca, mis ojos están puestos en ellos, en los abuelos, en las personas mayores, en las personas que son más vulnerables ante las situaciones difíciles y delicadas, y justo, en el momento que estoy escribiendo este artículo, estamos pasando seguramente, por una de las etapas más difíciles, para ellos, que muchos de nosotros los jóvenes conozcamos: el COVID19. Pero ya os digo, que esta etapa no esta siendo la más difícil ni la más complicada. Saben lo que ha sido la pobreza extrema, el emigrar a otras ciudades e incluso a otros países para poder dar de comer a sus familias, u otras historias terriblemente duras, que pude escuchar mientras se desarrollaba este proyecto.

Desde pequeño, ya sentía una especial sensibilidad hacia las personas de avanzada edad. Imagino que, como las vivencias que yo he tenido con mis abuelos fueron tan positivas, me hace quererlos a todos ellos de manera especial. De hecho, recuerdo como de pequeño me gustaba ir a pescar al río de la ciudad en la que me crié, Alcalá de Henares. Y ahora que ya soy algo más mayor, mi padre, que por entonces al atardecer dando un paseo iba a recogerme al río, me recuerda que siempre me encontraba sentado al lado de algún abuelo. Lo que no sabía mi padre, es todo lo que me reconfortaba estar hablando con ellos. Sus historias e historietas, eran siempre divertidas y enriquecedoras.

Recuerdo muchas de las vacaciones vividas de pequeños, pero en especial dos etapas: la primera de ellas, eran aquellas vacaciones en la que mi hermano y yo, junto con mi madre y mis abuelos, íbamos a Cullera, a los apartamentos Apolo, desde donde veíamos en primera fila a los Gordini, trapecistas que instalaban su espectáculo justo delante de nuestra terraza, y la segunda, cuando ya no podíamos ir allí, mi destino de vacaciones no era otro que la casa de mis abuelos, en un humilde barrio de vallecas, donde por las noches sacaban las hamacas a la calle, y disfrutábamos como niños de esos corrillos de vecinos, y donde mis padres en septiembre tenían que ir a recogerme o no volvía al cole... 

A ELLOS les quiero dedicar estas palabras, a ELLOS les quiero dedicar estas fotos, y a ELLOS les quiero dedicar estos recuerdos, a todos esos abuelos, pero muy especialmente... a MIS ABUELOS.

Proyecto "Abuelos"


Hace años, cuando empecé en la fotografía profesional, siempre escuchaba a mis compañeros con más experiencia hablar sobre sus proyectos personales. Hablaban de que era necesario hacer ciertos trabajos que nos llenaran el alma, que nos enriqueciesen de modo personal y que nos fuese gratificante el hacerlos. 

Y siempre que me planteaba hacer algo así, todos los pensamientos me llevaban hacía el mismo destino, y este no era otro que “los abuelos”: protagonistas de mi primer proyecto.

Ahora, mis vacaciones, las estoy disfrutando en un pueblo de la alta montaña leonesa, y una vez más, han sido ellos los que me han tratado con especial cariño. Entonces, como diría mi abuela, "Se juntaron el hambre con las ganas de comer", y así fue.

Uniendo mi pasión por la fotografía, con mi vivencia personal, decidí realizar este proyecto, compartiendo esta experiencia con todos los abuelos de este entrañable pueblo como es Polvoredo, y de paso, dejarles unos entrañables recuerdos.

Nada de esto hubiese sido posible, sin la estimable ayuda de mi escudero Rubén, alias "My Bro", que desde el mismo día que le conocí ha sido de gran apoyo, como su hermana Sonia (mi pareja), incondicionales haga lo que haga. Durante varios días, Rubén me ayudó a montar y desmontar el Estudio Portátil y a entrevistar a todos y cada uno de los abuelos, que gustosamente pasaron por allí para contarnos sus vidas, sus experiencias y las trastadas que hicieron de jóvenes (que no fueron pocas).

Os dejo unas fotos que hicimos del Making Of y del Set tan sencillo que montamos en el garaje multiusos de Isidoro, para poder compartir estos momentos, que no fueron más que el pretexto de poder hablar con todos las personas que quisieron pasar por allí a contarnos sus aventuras y desventuras y pasar un rato con nosotros.


Polvoredo y sus habitantes


Este pequeño pueblo de la alta montaña leonesa está situado a una altitud de 1240 metros aproximadamente, lo que le hace tener un extraordinario clima en los meses de verano, encontrándose muy próximo al Embalse de Riaño, donde va a parar el afamado río Esla. Está enclavado en el valle de Valdeburón y rodeado de grandes peñas como "Ten" (2.142 m), los valles de Muñenes, Becenes y Carcedo y picos como el llamado "del Fraile" la sierra de "Carcedo" o el mítico cerro "el Porro" desde donde se puede divisar Asturias y su mar.

Como cada 15 de agosto, vecinos y visitantes, devotos o arraigados a los actos tradicionales, rinden especial homenaje a Nuestra Señora de Riosol, con romerías y actos de culto y devoción. La patrona, se encuentra ubicada a unos 14 kms del pueblo. En la comarca, esta festividad viene celebrándose desde el siglo XIV, a los pies del puerto de Tarna, desde primera hora de la mañana los fieles se congregan en el altar de la ermita de Riosol, para celebrar una misa. Lugareños y veraneantes pasan la jornada en el alto del puerto, o las zonas de alrededor, donde disfrutan de las viandas al aire libre y rodeados con familia y amigos.

Entre las costumbres religiosas del pueblo destaca por su antigüedad la celebración de las "Albricias" en la noche del Sábado Santo. A media noche, los habitantes, que no son muchos, realizan una procesión portando la Imagen de la Virgen del Rosario partiendo y finalizando en la Iglesia de San Pedro, y pasando entre otros lugares, por el cementerio.

Este es un pequeño vídeo realizado durante el verano de 2020, tanto de Polvoredo como de sus alrededores.

Ellos


Los grandes protagonistas de este Proyecto. 
En total fueron 33 abuelos los que se prestaron a contarnos sus historias, pero no todos quisieron salir en "la tele" como dicen ellos. Así que no están todos los que son.
Más adelante, haremos especial mención a dos personas muy especiales. Pepe, que ya no está entre nosotros y Lisardo, que con 86 años nos contó parte de su vida que no fue nada fácil.
Os dejo aquí las fotos todos ellos: Isidoro, Angelines, Geni, Benigno, Victorina, Froilán, Salvador, Rosa, Ofelia, Saturno, Amador, Virginia, Juan, Emilia, Encarna, Bernardo, Mariano, Rosario, Maruja, Tomás, Encarna, Teresa, Mª Luz, Emiliano, Paco, David, Socorro y Benigno.

Especial mención, a...


Podría escribir la historia de todos y cada uno de ellos, ya que mientras hicimos las entrevistas íbamos grabando las conversaciones, fuente de donde posteriormente recogeríamos datos para poder completar todo nuestro reportaje. 
Permitirme hacer especial mención a dos protagonistas, que por edad y circunstancias de la vida, creo que se merecen unas palabras especiales.

Lisardo, nos conmovió especialmente, y es que según íbamos hablando con él, entendíamos porqué es una de las personas más queridas. Él, a sus 86 años, siendo el mayor del pueblo llegó a su entrevista, hacha en mano, ya que no para de hacer labores a diario, y es que en los pueblos no existe la edad de jubilación como tal.

Nacido en las Vascongadas, perdió a su padre a la temprana edad de 5 años, por ello su madre desplazó a toda la familia a su pueblo natal, dónde nada fue fácil. Él es el mayor de 4 hermanos, y tuvo que sacar a la familia adelante, trabajando de motril (ayudante de pastor de ovejas) de criado o en la cantera, perdiendo a su madre aun siendo muy joven. 

No terminarían ahí sus desgracias, ya que ha tenido que cuidar de su mujer durante los treinta últimos años de la vida de ella, dado que una enfermedad la hacia dependiente por completo. Así que, esa sonrisa mientras hablábamos arrastraba una vida dura de trabajo y de desgracias, pero la dureza de estas personas les hacen ser unos héroes en la vida. 

Pepe ha sido una de las personas que nos ha dejado a sus 81 años de edad. El día que estuvo hablando con nosotros, llevaba su muñeca vendada, estaba obligado a pasear con un andador debido a las dificultades físicas que tenía y eso le causaba algunos dolores en la muñeca. 

Nacido en Polvoredo y padre de 4 hijos, nos hablaba de las situaciones vividas, así como del trabajo duro y también de lo bien que lo pasaron en algunos momentos. Hasta con cierta gracia, nos contaba la forma en que con 13/14 años de edad, perdió tres dedos de su mano izquierda, que no fue de otra manera que jugando de pequeño con un explosivo de la Guerra Civil, que se encontraron en el pueblo, y que machacándolo con una piedra les explotó, y esto le costó esos tres dedos y 25 días de hospitalización. 

Pepe a diferencia de muchos otros del pueblo, siempre permaneció en el mismo, trabajando en la ganadería o como cortador de las subastas de leña.

Un hombre de gran corazón, que nos contó alguna anécdota entre gracias, ya que a pesar de todo lo vivido, nunca olvidan que en la vida hay que tener humor. Pepe D.E.P.

Una vez comenzado este maravilloso proyecto, me di cuenta de que se me quedaba corto, y decidí realizar un vídeo, que os dejo a continuación.

CONTACTO

Nombre (Requerido)
Dirección de Email (Requerido) *
Repite dirección de Email (Requerido) *
Teléfono (si prefiere que le llamemos)
* Texto
 He leído y acepto la política de privacidad
Hay un problema en la verificación del envío. Inténtelo de nuevo más tarde
El tiempo de espera para enviar el mensaje se ha agotado. Es necesario recargar la página y rellenar de nuevo el formulario
Es necesario rellenar todos los campos marcados con *
Se ha producido un problema en el envío del mensaje. Puede intentarlo más tarde
El email proporcionado no es válido
Debes aceptar la política de privacidad
Debes verificar tu email
El mensaje se envió correctamente. Muchas gracias
Un momento por favor...
Enviar   
+34607615917
Una vez enviado tu Email, tardaremos un par de días máximo en contestar. Si en ese plazo no has recibido ninguna contestación, por favor, revisa tus carpetas de SPAM o Correo No Deseado, puede que tengas allí nuestro Email con la contestación o presupuesto.

Por último, dar gracias todas y cada una de las personas que han colaborado en este proyecto, que no termina aquí, y que más adelante seguiremos sacando más cosas ya que hemos trabajado mucho más.

Gracias por supuesto a mis clientes que creen en el Fotoperiodismo de Boda o Fotografía Documental de Bodas, por encima de otro tipo de fotografía. 

Si quieres guardar un recuerdo similar de tus padres, o de tus abuelos, no lo dudes, ponte en contacto y nos encargaremos de crearlo de una forma muy especial.

Somos Fotógrafos de Bodas en Alcalá de Henares, pero siempre digo lo mismo "vamos allá dónde el amor nos crea necesarios"

Gracias a tod@s los clientes que seguís contando con nuestra forma de ver la fotografía.

Fotógrafos de boda en Alcalá de Henares, Fotógrafos de boda en Guadalajara, Fotógrafos de boda en Madrid, Fotógrafos comuniones en Alcalá de Henares, Fotógrafos de comuniones en Madrid, Fotógrafos de comuniones en Guadalajara. Fotografía Documental de Bodas Alcalá de Henares, Fotoperiodismo de Boda Alcalá de Henares


© Jesús Herranz Fotografía C. Dámaso Alonso, 20 - 28806 Alcalá de Henares (Madrid) // Tlf.: 607 61 59 17creado en Bluekea